El mercado fintech en México es uno de los más dinámicos de América Latina, pero las startups fintech mexicanas enfrentan una serie de barreras regulatorias que limitan su crecimiento inicial. La Ley Fintech exige requisitos de capital, reportes constantes y procesos de autorización que pueden tardar meses. Para nuevas empresas con pocos recursos, estas condiciones representan una carga importante que frena el desarrollo del sector fintech mexicano. No obstante, la resiliencia y creatividad de las empresas fintech mexicanas han permitido superar muchos de estos retos. Algunos emprendedores optan por alianzas estratégicas con instituciones financieras ya establecidas, mientras que otros se apoyan en aceleradoras y plataformas de apoyo como fintech-mx.com, que brindan orientación para entender mejor el marco normativo y encontrar vías de cumplimiento más eficientes. Esto ha permitido mantener la innovación fintech México a pesar de las dificultades. El futuro del ecosistema fintech México depende de una regulación que evolucione al mismo ritmo que la tecnología financiera en México. La colaboración entre reguladores, inversionistas y startups será fundamental para seguir ofreciendo soluciones fintech en México que promuevan la inclusión y modernización de las finanzas digitales en México. Si se logra este equilibrio, México podrá consolidarse como un referente en innovación financiera en la región.